domingo, 25 de enero de 2015

“INFIERNOS FISCALES PROVOCAN PARAÍSOS FISCALES”

En los pasados meses de estío con motivo de las vacaciones el programa “La noche en 24 horas” hizo lo que otros muchos otros españoles, tomarse un descanso. Una persona a la que le gusta estar al tanto de la actualidad hizo uso del mando y dio con el programa “El Cascabel” de 13TV. Quedé profundamente impresionado y maravillado con tan magnífico descubrimiento. Es una cadena que no se anda con medias tintas, y donde no hay que hacer el esfuerzo que se necesita en la tele de Rajoy para captar la manipulación informativa de su asalariado Sergio Martín. A mí, que prefiero la gente clara, me divierte ver como ora Antonio Jiménez, ora Carlos Cuesta actúan como jueces (léase moderadores) y parte. Como están prestos al quite y a puntualizar, corregir o interrumpir cuando algún contertulio emboscado se les desmanda. Da gusto ver lo relajado que está Paco Marhuenda entre colegas que le ríen sus ocurrentes y brillantes gracietas. Para él es un lugar de relax donde cargar pilas para torear los sábados los miuras de La Sexta.

Una noche el prestigioso, converso y adaptado catedrático de economía Ramón Tamames, ante el jolgorio generalizado de sus compañeros de fatigas, dejó caer la frase: “Infiernos fiscales provocan paraísos fiscales”. Me llamó bastante la atención su cita.

En el mundo existen en torno a unos 36 paraísos fiscales, aunque la cifra varía en función de lo que se considere como tal. En cualquier caso sean paraísos o pseudoparaísos son territorios con escasa fiscalidad, sobre todo para los no residentes, donde los magnates y grandes corporaciones empresariales ocultan sus haberes para eludir al fisco. Se calcula que un tercio del PIB mundial se encuentra en ellos. La mayoría de las empresas de nuestro IBEX35 también tienen sucursales en los mismos.

Son curiosas las manifestaciones de muchos gobernantes de países desarrollados criticando el fraude fiscal y su determinación a luchar por erradicar los paraísos fiscales. Curiosas más aún si tenemos en cuenta que la inmensa mayoría dependen de los países del G20. Es de imaginar que si, por ejemplo, se impusieran sanciones a Suiza, su temible ejército apoyado, lógicamente, por una compañía de arcángeles habida cuenta su relación con la Guardia Suiza Pontificia, intervendría en la UE. Es de imaginar igualmente que Luxemburgo no es mantenido por la Alemania de Angela Merkel, que ofreció a Juncker la colocación de presidente de la Comisión Europea. En el país de Merkel no existen lobbies empresariales para influir en las decisiones políticas.

En nuestro país el perrito faldero más leal de Angie no dudó en apoyarlo y en el principal partido de la oposición, el desorientado PSOE, nos encontramos con el malestar que causó en su cabeza de lista, Elena Valenciano, la negativa de Sánchez a votar la candidatura de Juncker. Llamativo en una señora que se pasó la campaña electoral intentando convencernos de que su candidato era Schulz y que había que combatir los paraísos fiscales. Los mismos europarlamentarios del PSOE de Sánchez, que va de progre, se resistieron a apoyar una comisión de investigación en el Parlamento Europeo sobre la actuación de Juncker en relación a los favores fiscales del Gran Ducado a más de 300 multinacionales.

Por otra parte nuestros gobernantes peperos, que llevan una legislatura de recortes de gasto público y de reducción de funcionarios, parece que no consideran que ampliar el número de inspectores de Hacienda pudiera significar realmente una inversión. No tanto por los mayores ingresos que supondría el aumento de inspecciones sino por su efecto disuasorio. Claro, eso siempre y cuando lo dedicaran a investigar las grandes bolsas de fraude, y no tanto a realizar paralelas a las empleadas de hogar.

Pero parece que así son las cosas y cada uno sirve a quien le paga, aunque después se quejan del auge de Podemos. Por cierto hablando de quien paga me pregunto quien lo hace a los economistas del FMI, que cada vez que se refiere a nuestro país nos recomienda mayor precarización laboral y devaluación salarial, y ni se acuerdan de los dichosos paraísos.

El mantenimiento del chiringuito, así las cosas, parece que recae en nuestro país principalmente en las rentas del trabajo y en los consumidores, y no tanto, como se supone que debiera ser en mayor medida, en las del capital. Realmente destacable teniendo en cuenta que las rentas del trabajo suponen menos de la mitad de la renta global. Además son tan “progresivos” que cuanto mayor es la dimensión de una empresa menos paga efectivamente.

Finalizo haciéndome eco de la noticia aparecida de que el 1% de la población mundial acumula casi tanta riqueza como el 99% restante y, evidentemente, los paraísos fiscales son pieza clave del hecho. Como cabría pensar que si el reparto impositivo fuera más justo y equitativo la mayoría tendría que pagar menos, podríamos plantearle al prestigioso y evolutivo Tamames si no cabría la posibilidad de volver su frase por pasiva y decir: “Paraísos fiscales provocan infiernos fiscales”.
 
Fermín.

domingo, 18 de enero de 2015

PERO SON DE LOS MÍOS


En la sociedad actual nuestros gobernantes, ya sea la izquierda o ya sea la derecha, realizan políticas que, aunque con algunas lógicas diferencias, en lo esencial no varían tanto. Realmente por mucho que nos quieran camelar, los ciudadanos decidimos menos de lo poco que nos creemos. Por tanto resulta extraño que nuestros políticos antepongan unas supuestas y exageradas (aunque en la práctica quedan en poca cosa) diferencias ideológicas a la decencia en unos casos y en otros, lo que es aún peor, a condenar regímenes totalitarios y tiránicos.

Podría empezar por los nacionalistas de ERC. Puedo entender (aunque no comprenda a aquellos que en vez de derribar barreras pretenden elevarlas) que una fuerza política aspire a la independencia de un territorio. Lo que ya ni entiendo es que para conseguir esta ensoñación, que conduce a la división de su propia sociedad y que parece irrealizable, se pongan una pinza en la nariz y vayan de la mano con una formación política como CiU donde las evidencias no solo afectan a su líder histórico, sino que se extienden a toda la formación. Tampoco entendí a Ibarretxe cuando con parecido propósito no dudó al ofrecer oxígeno a radicales que justificaban y siguen haciéndolo a quienes, refugiándose en un sentimiento identitario, anteponían éste a la integridad física de inocentes.

Tampoco entiendo como por aquí abajo IU se ha prestado al juego de mantener en el poder un régimen corrupto y clientelar, que se puede decir que prácticamente compra el voto de los andaluces con cuatro subsidios y enchufes, en tanto muchos se han llenado los bolsillos con el dinero de todos, y que ha conseguido que la única estadística que encabecemos sea la del desempleo. Por mucho que la hija del fontanero nos quiera hacer creer que es ella la solución para sacar a la luz lo sucedido, no debemos olvidar que esta señora ha hecho carrera en ese partido y que ha participado en los gobiernos que, por mucho que se quieran hacer los nuevos si, como parece, no lo han hecho desde el poder, al menos lo han tolerado de forma cómplice. Quizá realmente lo que haga sea obstaculizar las investigaciones desde la administración autonómica.

Esta señora me recuerda, en femenino, al encantador de serpientes Felipe González y no me extrañaría que una vez que acabe con el hombre de paja del PSOE, se haga con las riendas del partido y engañe al resto de españoles como hace ahora con nosotros. Da la impresión que el próximo presidente socialista, aunque tarde más tiempo del que les gustaría, llevará nombre de mujer.

Quizá hubiera sido preferible que IU hubiera actuado como en Extremadura y hubiera intentado, en la medida de sus fuerzas, moderar las políticas del PP. No creo que el resultado en sus objetivos de política social hubiera sido muy diferente. Evidentemente les ha podido el miedo al aparato propagandístico y mediático del PSOE que hubiera vuelto a sacar el espantajo de la pinza que tanto perjudicó a esta formación en su momento.

Lo que ya es aún más injustificable e incomprensible es cuando las formaciones anteponen su ideología a la defensa de unos principios democráticos básicos que, además, dicen defender. Aquí no hablamos ya solo de que roben o no, hablamos de la vida, la integridad y la libertad de las personas. Puedo entender que el apoyo de IU al PSOE tenga justificación en intereses electorales, lo que ya no sé son los votos que les pueda proporcionar su tibieza e incluso apoyo de regímenes como el cubano. No entiendo que cuando a un dirigente de esta formación se le pregunta por Cuba se desvíe de forma mecánica a los EE.UU. Es cierto que éste es un país que tiene muchas cosas criticables, como el hecho de que haya que ir con la tarjeta de crédito entre los dientes hasta para que te proporcionen una aspirina, pero las cuestiones negativas de esta nación nunca debiera servirles para justificar un régimen corrupto, tirano, torturador, opresor, sin libertades y sin garantías que mantiene en la miseria a su población.

Con la novedad del momento, Podemos, ocurre otro tanto. No sé que réditos les puede proporcionar, por bien que vayan en las encuestas, no criticar lo que ocurre en Venezuela. No tanto por el fracaso económico que ya es tradicional en ese país, sino por la progresiva pérdida de libertades. O considerar Ecuador el modelo a seguir cuando, aunque es cierto que han obtenido importantes logros económicos, vive un cada vez mayor control de los medios de comunicación con la consecuente pérdida de libertades.

Hasta recuerdo las buenas relaciones y compadreos entre dirigentes socialistas y el tirano cubano. La derecha tampoco debiera ir de digna porque lo único que le ocurre es que le faltan referentes. Aún recuerdo, hace ya bastantes años, como la fallecida Encarna Sánchez, decía que aunque todas las dictaduras eran malas, las de derechas al menos no te impedían salir del país. Es decir, como son de los nuestros ya no son tan malos.

Para un ingenuo como yo que hasta me creo o quisiera creerme esto de la honradez pública, de la libertad y de la democracia, estas tibiezas y medias tintas cuando se trata de los míos me hacen dudar de que muchos otros que nos gobiernan sean igual de ingenuos y se crean esto también. No entiendo a aquellos para los que el fin (llámese independencia) justifica los medios. A aquellos que intentan ocultar y defender a los corruptos hasta que las evidencias lo hace insostenible. O a aquellos otros que defienden a algunos que puede que te curen el cuerpo, pero te enferman el alma.
 
Fermín.

domingo, 11 de enero de 2015

EL TOTALITARISMO MONOTEÍSTA


Parece ser que el instinto de supervivencia es por delante del instinto sexual el más primario de todos los instintos animales, incluida la especie humana. Así debiera ser si nos creemos a Darwin y su teoría de la evolución de las especies. Es lo lógico en las especies que pretendan superar la selección natural. Además el hombre es un animal racional lo que unido al instinto de supervivencia pudieran llevar a la consecuencia de que el ser humano se pueda considerar un animal religioso. Así parece ser que ha sido desde que el mundo es mundo.

Nuestra civilización que tuvo su origen en lo que hoy es Irak, entre el Tigris y el Eúfrates, ha conocido diversas evoluciones de los distintos pueblos que la conforman. El antiguo Egipto, por ejemplo, era considerado el país de los mil dioses. El propio Herodoto quedó asombrado ante la multitud de dioses que adoraban y no tenían inconveniente en adorar también los de otros pueblos. En la misma Grecia tenían a los doce dioses del Olimpo y aunque Zeus se consideraba como el “Rey de los Dioses” cada uno tenía sus competencias, su ocupación; Hades el inframundo, Atenea la guerra, Poseidón el mar, Dioniso el vino, etc. Roma siguiendo la tradición helena, a pesar de tener los suyos propios, no tuvo inconveniente en adaptar y adoptar como propia la mitología griega, Zeus pasó a ser Júpiter, Atenea Minerva, Poseidón Neptuno o Dioniso Baco, etc. El imperio Romano ha sido el gran imperio de la historia, sobre todo la occidental. Evidentemente, como ha sucedido a lo largo de la misma con todas las potencias invasoras la expansión romana, supuso la sumisión de los pueblos conquistados, la esclavitud para sus pobladores en muchos casos, aunque también la expansión de la civilización clásica. Roma era cruel pero aceptaba las distintas creencias de los pueblos conquistados, en ocasiones incluso asimilaba y hacía propias parte de las creencias y dioses de estos. Pero topó con el irreductible pueblo judío y el judaísmo, la primera religión monoteísta. Las convicciones judías eran mucho más fuertes que las de otros pueblos conquistados. Pero los judíos solo consideraban a Yahveh como el dios del pueblo judío, no les interesaba el resto de la humanidad. Su dios, aunque único, era tan cruel como otros, como muestra el Antiguo Testamento. Roma no tenía inconveniente en aceptar un nuevo dios, lo que no toleraba era el desprecio judío al resto de dioses.

Un judío, Jesús de Nazaret, supuso la aparición de la religión monoteísta hegemónica. El cristianismo además de ser monoteísta introdujo el elemento de la universalidad, que no existía para los judíos. El cristianismo se basó en revolucionarias innovaciones de Jesús atractivas para las gentes. Así utilizando el poder multiplicador del imperio romano se sentaron las bases de lo que significa en la actualidad. El cristianismo, seductor en sus orígenes, acabó sumiéndonos en la etapa más oscura de nuestra civilización, la Edad Media. En esa época el avance del conocimiento, controlado por el clero, sufrió un estancamiento. No salimos de esa situación hasta el Renacimiento con la recuperación de los clásicos, el humanismo y la sustitución del teocentrismo por una mayor valoración del hombre.

El Islam surgió como una herejía del cristianismo y tuvo una amplia difusión debido a una doctrina sencilla y a su tolerancia con las religiones del Libro, tolerancia que contrastaba con el intolerante cristianismo imperante. En la actualidad se presentan en muchas ocasiones como unos criminales fanáticos, tal y como se ha demostrado recientemente con el atentado en París y anteriormente en Nueva York o Madrid.

Es evidente la necesidad religiosa del ser humano, pero también lo diferente que resultan las antiguas religiones politeístas de occidente con el monoteísmo imperante. El politeísmo era más plural; no existía un solo dios omnipotente, omnisciente, omnipresente y en definitiva todopoderoso; había contrapoderes divinos, controles divinos, ...; en definitiva, parece que era como más plural, democrático y tolerante. El monoteísmo nos habla de certezas y de una sola versión de la realidad (aunque se maten entre ellos para determinar cual es la verdadera). Cuando alguien se cree en posesión de la certeza absoluta cae en muchas ocasiones en el fanatismo y todo está justificado porque él es el portador de la Verdad. Se puede torturar, matar y realizar las más abyectas atrocidades porque actúan en nombre del verdadero dios. A fin de cuentas lo importante no es la vida terrena, sino salvar las almas para la vida eterna. Desde ese punto de vista se comprende que actúen y lo hayan hecho de esa manera a lo largo de la historia, y que se crean sinceramente lo correcto de sus actos. Este dogmatismo totalitario explica como las grandes religiones se han enfrentado y enfrentan no solo una contra la otra, sino incluso internamente. Dentro del mismo cristianismo se hacen sesudos análisis teológicos sobre la interpretación de las Sagradas Escrituras. Así, por ejemplo, el arrianismo fue considerado herético al no aceptar la divinidad de Jesús y se impuso el dogma trinitario del catolicismo. Los musulmanes se dividen fundamentalmente entre suníes y chiíes con sus correspondientes diferencias teológicas y sus consecuentes enfrentamientos, lo que sería otro ejemplo.

En la actualidad los sectores conservadores y el clero católico nos quieren hacer ver, cada vez que los islamistas cometen alguna atrocidad, la superioridad del cristianismo sobre el islamismo. Consideran que nuestro sistema de libertades es consecuencia de esa superioridad. Parece que olvidan que la Santa Inquisición duró hasta el siglo XIX, que el mayor exterminio sistemático de un pueblo, llevado a cabo por los nazis, contó con el silencio cómplice de Pío XII (declarado venerable por Benedicto XVI) anteayer, hasta ayer mismo imponían su doctrina a los españoles al amparo del poder, y cardenales como Rouco Varela, de haber vivido en otra época, harían bueno a Torquemada. No sería malo dejarse de tantas superioridades y ser conscientes de que la religión, sobre todo los totalitarios monoteísmos, han supuesto una rémora al avance de la humanidad, que las libertades las hemos conseguido a su pesar y que, como bajemos la guardia, lo mismo que se conquistan se pierden a su costa.

No sé si algunos alcanzarán el paraíso y la vida eterna, o si otros podrán solazarse en el mismo con cien vírgenes; lo desconozco. Lo que sí es cierto es que, como la historia demuestra, las religiones, particularmente aquéllas que creen que están en posesión de verdades y certezas absolutas, nos han frito a lo largo de la misma.
 
Fermín.

domingo, 4 de enero de 2015

PEQUEÑO NICOLÁS, OTRO LOCO MÁS

A lo largo de la historia se han producido magnicidios y otros acontecimientos a los que se les ha dado extrañas explicaciones. Particularmente en EE.UU. , la potencia hegemónica, la profesión de presidente es una profesión de alto riesgo con un índice de mortalidad realmente elevado (un 9.1%, 4 de 44) por no hablar de la siniestralidad laboral que sufre (al menos doce atentados) esta ocupación. Realmente teniendo en cuenta que la duración de la actividad es corta (normalmente no más de ocho años) desconozco si existe otra tan peligrosa para la salud. Las explicaciones normalmente han sido de lo más peregrinas, el más famoso, el de John Fitzgerald Kennedy es realmente un enigma. Parece ser que una causa muy común suele ser la enajenación de los que atentan contra la integridad presidencial. El último atentado, sufrido por Ronald Reagan, fue llevado a cabo por John Hinckley, un perturbado que se encuentra recluido en una institución de salud mental. El padre del enejenado sufragó buena parte de la campaña del patriarca de los Bush, que había sido director de la CIA. Estas coincidencias no deben ser extrañas en un país de 300 millones de habitantes.

En el país del Buscón y el Lazarillo nos hemos divertido con las peripecias del Pequeño Nicolás. Este joven parece poco menos que el agente 007 de Su Preparada Majestad. Todavía no me explico como un gobierno con la tijera tan presta a recortar realiza un gasto tan superfluo en el personal del CNI para que estén todos cruzados de brazos excepto este chaval. También en este país eso del periodismo orgánico es una profesión que, en tiempos de crisis, ofrece buenas expectativas laborales. Fundamentalmente prestan sus servicios a los dos grandes partidos, e imagino que también sucederá lo mismo con los nacionalistas periféricos. En este caso los servidores del PP como el converso Antonio Pérez Henares “Chani”, el aventurero e intrépido Alfonso Rojo, y como no, el portavoz oficioso de ese partido, Paco Marhuenda entre otros, están en la labor de iluminarnos, haciéndonos ver que se trata de un payaso, un petrimetre y un simple estafador. ¿Para qué realizar periodismo de investigación ante un caso tan evidente? Es mejor apoyarse en los dictámenes psiquiátricos y a fin de cuentas, ante un perturbado, ¿por qué tomárselo en serio? Una persona así, evidentemente miente en todo lo que dice, nada será verdad. Las elecciones se acercan y no hay que perjudicar al líder.

Parece ser que todos los ciudadanos nos fotografiamos y alternamos con la plana mayor de ese partido (Ana Botella y su marido Jose, Esperanza Aguirre, Ignacio González, Rajoy y un largo etcétera); invitamos a dormir en nuestro sofá a altos dirigentes empresariales; nos atienden los Pujol; si un secretario de las infantas se relaciona con nosotros es de lo más natural, y todos a los veinte años hacemos gestiones con un Secretario de Estado y bromeamos con él. Algo propio de un simple megalómano delirante. También sabemos que en el BOE aparece el nombramiento de todos los que están al servicio de la inteligencia de este país y por eso, cuando los tienen que detener, lo hacen los servicios internos, que lo deben tener como lectura de cabecera.

Da la impresión de que Nicolás Bond pudiera ser un estafador que ha medrado en el PP y que parece de lo más fantasioso aunque, ¿sólo eso? La misma impresión da de que existe un interés por parte de los más altos niveles del poder, utilizando todo el aparato del estado y los medios de comunicación afines, de querer justificarlo todo apoyándose en informes psiquiátricos y hacernos ver que solo es un perturbado megalomaníaco. No es necesario aclarar lo sucedido sino que lo que hay que hacer es ningunear al pequeño, desprestigiarlo, dejar correr el tiempo y un tupido velo caerá sobre lo sucedido. A lo sumo se ofrecería al populacho la cabeza de turco de García-Legaz con lo que se demostraría la implacable lucha por la transparencia y contra la corrupción de nuestros dirigentes.

Me preocupa que este país pueda salir de la crisis habida cuenta de los problemas mentales de su población. No tanto por algunos casos de locura sino por muchos de crédula tontura colectiva. Con este material humano la empresa se presenta harto difícil.
 
Fermín.