domingo, 27 de septiembre de 2015

POR FAVOR SEÑORÍAS, DEJEN EN LIBERTAD A JULÍÁN MUÑOZ, POR FAVOR


El hecho de que yo no sea creyente no tiene que significar, ni mucho menos, que no comparta (aunque se dude hasta de su propia existencia histórica) bastantes de las frases de Jesús de Nazaret. Cuestión diferente es que tenga muy serias dudas de su carácter divino, aunque esto es realmente una cuestión de fe de cada individuo y ahí ni puedo ni debo entrar, solo respetar.

Una de esas frases es aquella que dice “No juzgues y no serás juzgado”, aunque sin llevarla al extremo. Particularmente yo sería incapaz de decidir sobre la vida del cualquier otro ser humano, aunque entiendo que deben existir personas que tengan esta vocación porque si no fuera así, no se podría vivir en sociedad, ya que  predominaría la ley de la selva. De la misma manera que tampoco tengo vocación de médico y nadie podrá dudar del impagable servicio que estos profesionales nos prestan y es necesario que existan personas que sí la tengan. Y reconozco que en ambos casos la inmensa mayoría de ellos no lo hacen precisamente por dinero.

Para mí la necesidad de la justicia la veo más bien en su sentido disuasorio. Más allá lo que más podría entender, con dificultad, es la “Ley del Talión”, que es más simple. Además como parece ser que existen métodos donde se puede “matar” y “resucitar” a una persona, pues al que haya cometido 200 asesinatos se le hace 199 y a la que hace 200 se le da matarile realmente y ya está. No sé si con esto los familiares encontrarán satisfacción, porque más allá (aunque creo que lo anterior ya hasta lo supera) lo que se puede hacer no es necesario ni decirlo. Y cuando se realizan determinadas “actividades” entonces antes creo en la existencia del mismo Demonio (que deben inspirarlos) que en la del propio Dios. A no ser que nos engañen los libros de historia, y no solo desde la Santa Inquisición, sino desde muchísimo, muchísimo antes.

Cuando legisladores y juristas empiezan a tasar la duración con que se ha de castigar cada delito ya me pierdo. Si esto estuviera tan claro (y no hablo de regímenes totalitarios) entonces un mismo delito debiera tener similar castigo en todas las democracias y realmente no es así, puesto que en uno son veinte años, en aquél  treinta, en el otro lo “ejecutan” (elegante término para expresar la palabra matar) y en cualquier otro  cuarto y mitad, ¿por qué no?

Pero si me cuesta entender cuando dicen que la justicia ha de ser “justa” (esa elevada capacidad que parece que algunos poseen para tasarla), cuando me hablan de que ha de ser “ejemplarizante” empiezo a sufrir alucinaciones. No entiendo por qué extraña razón se ha de elegir a personas concretas para dar ese ejemplo. Incluso si se quiere “ejemplarizar”  todos sabemos cuál es la actividad con cifra más alta en este país después de la del desempleo. Por tanto candidatos sobran. Lo que ya no sé es si existen tantos que aúnen al tiempo los requisitos de relevancia pública  y ninguna influencia por ahí arriba. Muñoz, por supuesto, parece que su ex pareja también, imagino que habrá algunos más, pero no creo que sean muchos y ahora mismo no caigo en otro.

Un lego no va a dudar de los fundamentos jurídicos de la Audiencia de Málaga. Comprendo también que para mover 10 millones (si los tuviera) de Islas Caimán a Gibraltar no es preciso ser capaz de ganarle una carrera a Usain Bolt. Lo que sucede es que mi elemental sentido común me lleva a la conclusión de que para una  persona que se encuentra en las condiciones de la fotografía (la de más abajo)

http://www.vanitatis.elconfidencial.com/noticias/2015-09-26/julian-munoz-hospitalizado-de-urgencia-tras-sufrir-un-amago-de-infarto_1037430/

no es esa su principal prioridad, a no ser que sea Antonio Banderas (y no precisamente por lo guapo). Desconozco el tiempo de vida que le queda a Julián Muñoz, pero ya el viernes lo hospitalizaron y no veo la necesidad para reducir lo que le quede a la mitad, y no permitirle pasarlos en paz, con tranquilidad con su familia. Nunca lo podré entender.

Sé que Muñoz no se ha encontrado una tarjeta en el suelo y la ha dedicado a comprar algunos pañales, pero, al menos para mí, aunque hubiera asesinado a 1.000 personas (que tampoco es el caso) llegados a estos extremos, no veo el sentido de este trato.

Una sociedad que ante esta situación no reacciona y se moviliza es una sociedad insensible y ENFERMA. Como  soy consciente de que en otros países “civilizados” la enfermedad está aún más acentuada (lo del yankerío es de nota) y me parece que no es cuestión de probar fortuna en Somalia, parece que la única alternativa que podría quedar (antes de correr el riesgo de que puedan aplicarte esta “justicia”) es irse a ese prometido “paraíso marciano” donde cualquier día nos dicen que se viviría de maravilla. Yo hasta me lo creo y mientras se instala la colonia y se monta aquello no creo que viviera hasta que se organizara un Estado que te amenazara con esta clase de “justicia”.  Preferiría arreglar las cosas, antes de llegar a estos extremos de “justicia”, a tiros como en el Far West. Al menos en este caso sería en caliente y no de esta forma fría, meditada, metódica, insensible y (por supuesto) legal.

Solo me queda terminar como empecé:

Por favor señorías, dejen en libertad a Julián Muñoz, como a pesar de todo sigue siendo un ser humano pues seamos todos humanos, por FAVOOOOOOOOORRRRR.............

Fermín.

domingo, 13 de septiembre de 2015

EL ESPERPENTO IBÉRICO


El famoso diestro Marianico el Corto (y no precisamente por la estatura) paecía hasta ahora que sabía lidiá al morlaco catalán. Faena larga, aburría y de largas cambiás, donde se notaba que el toro no necesitaría el estoconazo y cedería por agotamiento.

De repente al Corto paece que l'ha entrao el Síndrome de Estocolmo y se ha puesto de parte del astao, seguramente por el sufrimiento que le veía padecé. Ya sabemos que en sus ratos libres el Corto se dedica al mangoneo de la Celtiberia y l'ha dao por legislar ad hoc p'al sufrío toro, al que ya le promete un retiro en un corrá. Esto ya lo hace el famoso Maduro el Tarugo, pero es evidente que estas inteligencias superiores se pasan las ideas por telepatía. En fin, unos 20.000 apoyos más p'al iluminao.

Otro famoso matador, Morenito de Maracay, que además se dedica a obedecer a la milicia, ha puesto su granito. Ya conocemos de la sensibilidad del de Maracay que enfermó la pobre criaturica cuando s'enteró que un manos largas la tomó con una milica. Aunque se le notó desmejorao, en cuanto pudo se deshizo en disculpas ante la susodicha, que emocioná por el trato recibío, lo agradeció entre lágrimas y pasó a otra dedicación, ya que como guerrera había culminao toas sus expectativas. Este maestro sin par, en vez de pasarse tres semanitas en camita con sopita, paracetamol y callaíto pá recuperarse de la nueva impresión, avisa a los partidarios del bicho que como se desmande la maná los milicos pá eso están. Eso otros 50.000 y el morlaco en la gloria como Dios. Y todavía quedan dos semanas pá ayudá la causa del iluminao.

Como por mucho que crea el astao tós estamos bajo los Pirineos, ha cambiao sus prioridades. Ya se sabía que lo primero pá él no eran ni el paro ni la pobreza; sino ser el que recoja y maneje el parné, y el que, como el Corto, parta el bacalao entre los justicieros. Yo hasta lo comprendía visto el chiringuito que tienen montao. Pero ahora el iluminao morlaco tiene como la principal prioridá la creación de su propia banda guerrera. Con lo sobrao que anda de dineros y con la prometía ayúa del veterano maestro (mar)Gallo seguro que encuentra algo arreglao en las chatarras de la II Guerra Mundial. Y con su indudable ingenio las convierte en armas de destrucción masiva en ná y menos seguro.

Visto el panorama y en tiempos en que tó quisque tiene que emprendé, mi innegable talento empresariá ha llegao a la conclusión de que lo de las nuevas tecnologías está mú explotao y el filón está en la ferretería, particularmente la tornillería. Pero de forma integrá; fabricación, distribución, venta e instalación a tanto necesitao.

Como sé que hay mucho chivato que sabe del cariño que tengo por la fauna y ese astao en particulá, lo mismo el iluminao agarra un caza, le da a los pedales del mismo, se planta in my house y me suelta un petardo. Presiento que mi vida no vale un chavo, por lo que los pocos ahorrillos que tenía pá dedicá a montá mi emporio los voy a gastar en una cuadrilla de paletas y un látigo de siete gatos que viene mú bien pá aumentá la productividá. De tal manera que en dos semanas o me construyen un búnker o se van a enterá los del palustre.

Después me encomendaré a tós los Dioses del Averno y si hacen caso a mis plegarias, o funciona el búnker,  o el peperío fracasa en su campaña proiluminao (que tó pué suceder) lo mismo hasta sobrevivo. Y aunque no me queden ni los gayumbos en cuanto le proponga el negocio a la colegui Ani seguro que le ve la punta, me da un crédito ilimitao, y en dos días se lo devuelvo y me monto seguro, a no ser que alguien se entere y me lo pise antes.

En la Celtiberia se forra el marío de Marnie de Borbón; el Divino (acomplejao) m'ha dicho que el papi de la tal ha superao su milagro de multiplicación de panes y peces; por aquí abajo lo hace cualquier carguillo que no sea un rara avis o esté tarao; el peperío valenciano casi los supera; que contar de los amigos de la Espe (y mía que tiene amistaes la señora); otros con su piquito de oro hacen unos informes tan geniales que están hasta malpagaos (400.000 eurillos de ná); lo de la destrucción de ordenatas debe dá un dinerá; el Res Honorable y su prole han ganao tanto billete que no sabe ni dónde meterlo, qué decir de los del 3, 5, 20, 400 % o lo que sea si algún día nos enteramos......

Y con totá honradez, que nadie lo dude. Por tanto, y como tós tenemos el mismo derecho a comé,  yo tamién lo tendré  a mi parte, ¿o no?
 
Fermín.

domingo, 6 de septiembre de 2015

LA DICTADURA DEL CAPITALIADO

Realmente que los ciudadanos creamos que en nuestras democracias occidentales el poder está en manos del pueblo tiene grandes similitudes con pensar que existen  los Reyes Magos. A lo largo de la historia siempre han gobernado las élites, aunque con mayor o menor tolerancia con la plebe según la época. Eso ha sucedido con las teocracias, con la República de Roma, con los sistemas feudales, con los totalitarismos comunistas y se podrían dar muchos más ejemplos, aunque yo pretendo concluir en que en la actualidad tampoco es tan diferente.

En cualquier caso ya digo que en unas ocasiones se ha respetado más que en otras al pueblo llano y nuestros sistemas democráticos, al otorgarnos el derecho al voto, permiten que al menos nos traten con cierta consideración y tolerancia; nos concedan algunos beneficios, derechos  y libertades y, resumiendo, nos tengan cierto respeto,  aunque solo sea por el hecho de que se ven obligados a ello si quieren seguir en la poltrona. Pero de ahí a creer que están realmente al servicio del pueblo es pecar de una gran ingenuidad.

La historia no es lineal y ha tenido sus revoluciones y sus involuciones, y me temo que en la actualidad estamos en el segundo de los casos.

Normalmente en la vida las cosas no suelen ser ni blancas ni negras, sino que presentan diversas tonalidades. Esto tampoco quiere decir, opino, que, como decía Aristóteles la virtud esté en el término medio, aunque no creo que este trascendental filósofo pretendiera con su frase establecer con precisión matemática donde estaba éste (lo que muchos denominan la “dictadura del término medio”) sino más bien dar a entender que había que huir de los extremismos. Posteriores filósofos, como Hegel, establecieron una dialéctica, un debate de posiciones en ocasiones antagónicas, para tratar de llegar a una  conclusión que, sin que tuviera que significar necesariamente la utópica virtud, al menos permitiera progresar.

El problema que tenemos en la actualidad es que no existen ideas alternativas reales al pensamiento único imperante (principalmente en materia económica) y esto nos puede conducir,  si no estamos ya, a la antedicha involución.

El fiasco del comunismo ha llegado a considerar anatema toda la vasta obra de una inteligencia privilegiada como la de Karl Marx que realizó importantes aportaciones en campos como la filosofía, la economía, la sociología o la historia. Marx, como cualquier otro intelectual que haya dado la historia, hay que situarlo en su contexto histórico para comprenderlo. Él, ya en su obra, con evidente influencia hegeliana (aunque con una concepción materialista y no idealista), nos hablaba de la contraposición de la tesis y la antítesis para llegar a la síntesis. Después esta síntesis se convertía en nueva tesis y mediante un continuo debate (dialéctica) se producía el progreso social. El problema no es tanto Marx, sino aquellos que al considerarse marxistas entienden que su ideario es dogma de fe. No creo que nadie esté en posesión de la verdad absoluta y a Marx lo que hay es que valorarlo  porque de todos se aprende. Evidentemente tratar de trasladar las ideas de un pensador del siglo XIX a la realidad del siglo XXI sin más, es el error en el que creo están los comunistas de IU (a Podemos es mejor no referirse porque ayer decían una cosa, lo que digan hoy es diferente y sus posiciones de mañana son toda una incógnita). En cuanto a la otra pretendida izquierda, que llevan en sus siglas la palabra socialista, pero que ahora se definen como socialdemócratas,  carecen de ideas realmente transformadoras y se limitan a intentar dar un toque social, cuando pueden y no nos llevan a la ruina, al pensamiento único liberal imperante.

El capitalismo en sí mismo tampoco es que tenga que ser negativo ni mucho menos, sino puede que todo lo contrario. Para un lego en la ciencia económica quizá lo fundó aquel antepasado nuestro que cuando cazó dos conejos intercambió uno de ellos por varias manzanas con un vecino. A partir de ahí surge la especialización y el comercio que es lo que históricamente ha convertido las sociedades en prósperas (sobre todo cuando existe libertad para efectuar los intercambios). Pero esto ya lo hacían griegos y fenicios, y, que yo sepa, por entonces aún no había nacido el padre del liberalismo, Adam Smith, quizá el primer gran economista de la historia.

El problema surge cuando se considera al capitalismo liberal como el estado de máxima perfección económica, ya que si lo hemos alcanzado carece de sentido intentar progresar. Como de las virtudes del pensamiento único ya se encargan muchos de repetirlas hasta aburrirnos, tampoco pasa nada por enumerar algunas de sus carencias o defectos, que al menos en mi opinión, se me ocurren:

1. La ley de la oferta y la demanda es una buena manera de fijar el precio de los bienes, quizá la mejor que se conoce, pero no es perfecta en absoluto. Aunque si   creemos que la aportación a la sociedad de Messi es superior a la de cualquier premio Nobel en alguna de sus  disciplinas me callo. Caso contrario cabría valorar un justo sistema fiscal como un necesario elemento corrector de desigualdades.
2. Los agricultores para evitar la caída de precios de sus productos se ven obligados a destruirlos  en muchas ocasiones. Esto provoca la aberración de que en un planeta que tiene capacidad de producir alimentos para toda su población un alto porcentaje de la misma pase hambre, en muchas ocasiones severa.
3. Es razonable pensar que el comercio lleva a la prosperidad. Pero eso es una cosa y otra la vorágine consumista a que nos vemos abocados, para que el sistema no colapse. Eso provoca  que adquiramos, por ejemplo, ordenadores o móviles con unas prestaciones que la mayoría solo utiliza en un pequeño porcentaje. O que en un país como el nuestro, donde la velocidad máxima está limitada a 120 Km./h., se permita la comercialización de deportivos con capacidad de casi triplicar dicho límite sin instalarle algo tan  tecnológicamente simple como un limitador de velocidad, pongamos de hasta 150 ó 160 Km./h. Lógicamente de hacerlo perjudicaría notablemente al sector automovilístico y provocaría problemas al sistema productivo. Es preferible multar y recaudar con ello, que hacer lo anterior y así evitar muchos accidentes mortales.
4. La desregulación que exige el liberalismo provoca que se intercalen los períodos expansivos con las contracciones económicas cuyas consecuencias sufren las clases más desfavorecidas por regla general. En ocasiones las bases del crecimiento económico son de poca consistencia y la crisis que le sigue es de caballo, como sucedió con la Gran Depresión norteamericana o con la liberalización del suelo en nuestro país por parte del milagrero Rato (aunque realmente se trate de una crisis a nivel mundial). En el primer caso necesitaron de una guerra para superarla. En la actualidad ahí estamos, aunque es comprensible que no se tomen medidas más drásticas dado que no corremos el riesgo de que los japoneses desembarquen en California como temían los norteamericanos.
5. La libre competencia es muy positiva, pero cuando se da entre países con realidades económicas y  derechos sociales realmente dispares, la competencia se produce de forma distorsionada lo que nos conduce a que ésta se produzca en forma  de regresión de derechos sociales. No debiéramos permitir que la libertad de movimientos de capitales, que es positiva, no  viniera acompañada de un control internacional que corrigiera estas distorsiones.
6. Nos obliga a perder la perspectiva humanista y el sentido del ser humano como individuo que busca su desarrollo personal. Así el trabajo, que en realidad no debiera ser más que un medio, se convierte en un fin. Ya no se trabaja para vivir, se vive para trabajar.
7. Por mucho que pretendan convencernos los empresarios nunca han tenido, ni tienen actualmente, el más mínimo interés en difundir los valores democráticos occidentales allá donde invierten. Su interés es simple y llanamente obtener el máximo beneficio con una visión cortoplacista y miope de sus consecuencias a medio/largo plazo. Esto ha supuesto que hayamos convertido a un  régimen  atroz para con su pueblo, en un gigante (y quizá con los pies de barro) económico. De tal manera que nuestra chinodependencia ya es irreversible y la ralentización que actualmente sufre su economía pueden provocarnos unas consecuencias en las que los economistas no se ponen de acuerdo, pero que ya conoceremos más pronto que tarde. No niego a China (actualmente una verdadera dictadura del capitaliado) su derecho a ocupar el papel internacional que le corresponde, pero sí reivindico el derecho de su ciudadanía a unas libertades y derechos que se aproximen en algo a los occidentales. Hecho en el que nosotros debiéramos ser los primeros interesados, por la cuenta que nos trae.
8. Etc.

El liberalismo imperante (hijo de Adam Smith) atribuye exclusivamente el desarrollo económico (y  hasta el social)  experimentado por la humanidad en los dos últimos siglos a sus virtudes ideológicas. No dudo de la importante aportación a la economía de Adam Smith, pero lamentablemente (y creo interesadamente) olvidan algunas cuestiones:

1. Contemporáneo de Smith fue un tal James Watt que inventó la primera máquina de vapor, invento clave para que se produjera la Revolución Industrial con la utilización de los combustibles fósiles. Esta revolución es equiparable en importancia a la que dio origen al Neolítico (desde el Paleolítico) al descubrir el hombre la piedra tallada, desarrollar la agricultura y ganadería, y pasar de ser nómada a sedentario.
2. Principalmente durante el siglo XIX surgieron figuras como la de Karl Marx que crearon una conciencia de clase entre los trabajadores (proletariado) que pasaron al activismo político y sindical. No creo que si el conservador Von Bismark no hubiera llegado a verle las orejas al lobo hubiera creado el primer germen de seguridad social de la historia.
3. Marx, cuando incitaba a la revolución en su obra, apostaba porque la misma se produjera en los países más avanzados de Europa como eran Francia, Reino Unido o Alemania, pero no imaginaba que la misma se daría en el país más atrasado, Rusia. Evidentemente la semilla revolucionaria germinó en un país donde la nobleza y el clero tenían sometida a la población a una situación prácticamente esclavista. En los países más avanzados ya habían procurado ponerse algo las pilas ante lo que veían venir.
4. El estado del bienestar del que tanto presumimos en Europa (y que peligra realmente) tuvo su origen precisamente en el temor que inspiraba en EE.UU. la expansión soviética en una Europa empobrecida tras la guerra. Desde que la amenaza soviética desapareció en 1.989 (y no tanto desde la actual crisis) parece que lo que antes se podía permitir ahora ya no es posible. No hay más que ver que lo que les parecía bien para Europa, los norteamericanos no vieron tanta necesidad de hacerlo en su propio país.

Al principio ya decía que dudaba de que los políticos que elegimos estén realmente al servicio del pueblo al que se supone representan. Si así fuera no se explica que los paraísos fiscales se encuentren ubicados en lugares que o pertenecen o están en el ámbito de influencia de las democracias más poderosas del planeta. Si tenemos en cuenta que se calcula que en torno a un tercio del PIB mundial se encuentra depositado en ellos no creo que sea necesario tan siquiera saber sumar dos y dos. Los “formadores” de opinión lo consideran como parte del paisaje, algo que hay que aceptar porque las cosas son como son y no se pueden cambiar. Así lo expresa el amigo Eduardo Inda. Alfonso Rojo destaca que el gasto social en Europa supone el 60% del que existe en el planeta, entendiendo que es éste el problema y no el hecho de que en el resto del planeta solo suponga el 40%. Por parte de la socialdemocracia a lo más que  aspira ya es a conseguir la “igualdad de oportunidades”, de tal manera que para ellos a los menos capaces, a los más desfavorecidos, poco menos que les puede partir un rayo. Y si te marchas más a la izquierda, sí lo denuncian, pero tienen unas propuestas económicas que asustan, sobre todo si se llevan a cabo unilateralmente. Ayer Paco Marhuenda declaraba en “La Sexta Noche” que Europa caminaba hacia la decadencia. Yo más bien considero que no es que camine sino que está. El modelo social europeo está en claro peligro, cuando se  imponga el norteamericano ya vemos las tensiones sociales que provoca su insolidaridad, y si fuera el chino hago las paces con Artur Mas y le pido asilo en la Luna.

El problema que tenemos en nuestras actuales democracias es que elegimos a políticos que parecen más preocupados por sus futuras colocaciones que por servir a sus electores, o que tenemos un sistema de financiación de los partidos en que se permite la injerencia de los poderes económicos. Ya escribí algo al respecto en su momento:

http://opinionpropiadefermin.blogspot.com.es/2014/11/financiacion-publica-vs-financiacion.html

Debiéramos comprender que si queremos democracia de verdad algo debemos pagar por ella. Y aunque ignorante en economía soy consciente de que cuando hay voluntad política de hacer las cosas, éstas se hacen y la historia está llena de ejemplos. De la misma manera que cuando no se presentan alternativas, cuando se impone un solo modelo, cuando no gobiernan los políticos (de verdad) sino los tecnócratas,  se produce la involución que es en lo que estamos.

Fermín.